Pasión por leer. Pasión por escribir.

Portada > Noticias > El español, nuestro idioma > La expresión 'A la vejez, viruelas': origen y significado

La expresión 'A la vejez, viruelas': origen y significado

Un refrán que habla en general de aquello que sobreviene a destiempo o de modo inoportuno.

29 de abril de 2024. Estandarte.com

Qué: La expresión 'A la vejez, viruelas'

El refrán 'A la vejez, viruelas' se emplea cuando sobreviene algo fuera de ocasión o tiempo, según nos explica el refranero del Instituto Cervantes. Se dice en tono irónico cuando alguien de cierta edad actúa según es costumbre en la juventud, incluido en el amor. Se refiere especialmente a quien se resiste a envejecer y lo demuestra haciendo conquistas amorosas.

En consecuencia, se aplicaría a un viejo verde o a quien tiene un comportamiento impropio de una persona de cierta edad. En sentido muy general, se emplea si ocurre algo a destiempo. Es un refrán de uso actual. 

La viruela, con erupción de numerosas pústulas contagiosas que dejan señal si uno se rasca la piel, es una enfermedad propia de la infancia. Alberto Reyes, en su libro Quinientas frases célebres del lenguaje universal (Barcelona, 1944), dice que esta expresión es el «título de una obra de Bretón de los Herreros, y con ella se moteja a los que se enamoran tardíamente o a los viejos que hacen cosa que no responde a su edad. Se aplica también a lo tardío y fuera de sazón».

El dicho es más antiguo de lo que supone este autor. Lo cita el maestro Correas en su Vocabulario de refranes del primer tercio del siglo XVII (ed. de 1924, p. 25). En cambio, no aparece ni en el Refra­nero español, de Hernán Núñez (1555), ni en el Tesoro, de Covarrubias (1611).

Sbarbi, en su Gran diccionario de refranes (ed. de 1943), lo explica así: «Dícese algunas veces de todo aquello que, en general, llega tarde, y otras, concretándose a la edad madura, de los viejos alegres y enamorados, quienes, por razón de sus muchos abriles, parece que debían estar exentos de los ataques de Venus, como lo están, por lo regular, de las viruelas».

Como se ve, la expresión que comentamos se dice, generalmente, de los viejos que se enamoran tardíamente y de los llamados viejos verdes, según indica José María Iribarren en su El porqué de los dichos (Editorial Ariel, 2013).

Comentarios en estandarte- 0