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Polémica en la Feria del Libro chilena
El eslogan "Filsa pa'l que lee" no ha gustado a muchos...
24 de octubre de 2013. Emilio Ruiz Mateo
Qué: Polémico eslogan en la Feria Internacional del Libro de Santiago de Chile: "Filsa pa'l que lee"
Si se trataba de llamar la atención con la nueva edición de la Feria Internacional del Libro de Santiago de Chile, lo han conseguido, desde luego, con el polémico eslogan "Filsa pa'l que lee", que en España sonaría a algo así como “Polla al que lo lea”.
"Filsa pa'l que lee" evoca al momento en Chile a los grafitis que a menudo pueden leerse en los baños públicos: "Pico pa'l que lee", suele encontrarse, "una expresión agresivo- infantil que se anota no sólo en los baños, sino en los libros, en las micros y en cualquier espacio que pueda ser visto por alguien. Es una frase de descarga psicológica", según nos cuenta desde Chile la periodista Andrea Lagos.
La idea es obra de la agencia Arbol Color, que a buen seguro debe estar aplaudiéndose a sí misma por el alcance que la Feria del Libro de Santiago de Chile ha logrado gracias a la frasecita. Pero no a todos les ha parecido lo mismo: el presidente de la librería Feria Chilena del Libro, Juan Aldea, ha dejado clara su postura en una carta publicada en el diario: “Nosotros, que estamos en defensa de la lectura y los hábitos lectores, nos parece mal que alguien como la Cámara del Libro esté haciendo una invitación de este tipo, porque usted sabe que ese es un grafiti de los baños que tiene un significado bastante feo".
Marcial Cortés Monroy, el encargado de la campaña publicitaria, aseguró que "cada uno es libre de opinar lo que quiera", y que han optado por no responder a la carta, ya que ante todo lo que pretende la adopción de la iniciativa es hacer "más inclusiva" la feria. “Lo que estamos haciendo es un homenaje al lector, porque este año Filsa no tiene un país invitado. El invitado es el lector", remata.
Los responsables de la Feria quieren impulsarla. Así lo ha declarado Arturo Infante, presidente de la Cámara Chilena del Libro: “Se trata de posicionar a FILSA como una de las ferias de libro, o festival cultural del libro, más importantes de Hispanoamérica. No es fácil para un país que tiene un pequeño mercado de lectores, pero es algo que se puede obtener otorgando a la feria un sesgo propositivo e ineludible en el circuito de ferias y festivales literarios. Esperamos ir de menos a más, pero la feria parte con una experiencia y posicionamiento de más de tres décadas”. Muchos interpretan la elección del eslogan "Filsa pa'l que lee" como parte de ese deseo de dar a conocer la Feria a una mayor escala.
La Feria Internacional del Libro de Santiago de Chile (FILSA) tendrá lugar en el Centro Cultural Estación Mapocho desde el 25 de octubre hasta el 10 de noviembre. En ella se entregará el Premio Iberoamericano de Letras José Donoso 2013 a Pedro Lemebel y se podrá disfrutar de la presencia de autores como Ildefonso Falcones (España), Daniel Krauze (México), Juan Sasturain (Argentina), Ignacio Ramonet (España), Francisco Goldman (USA), Santiago Posteguillo (España), Alonso Salazar (Colombia), Ricardo Chávez Castañeda (México), Juan Villoro (México), Ricargo Piglia (Argentina), Paola Gaviria (Ecuador)… Y, por supuesto, un gran equipo de autores chilenos: Pablo Simonetti, Alejandra Matus, Óscar Hahn y Ángel Parra, entre muchos otros.
Comentarios en estandarte- 3
1 | Leandro
29-10-2013 - 13:10:52 h
Ese tal Marcial Cortés Monroy pretended hacer "más inclusiva" la feria. Observo que, tal como acá en Argentina, en nombre de la inclusión se están permitiendo barbaridades increíbles. Me asusta el futuro...
2 | justito
30-10-2013 - 00:47:29 h
Coño... no es pa tanto... Besitos pa'l que lee esto...
3 | justito
30-10-2013 - 00:51:49 h
Oye Leandro ya quisieras tú vivir en Argentina donde puedes hacer lo que se te cante en materia de amor ... puedes hacerlo con una o con dos, con uno o con dos... o solo, que tu debes de ser de esos que se autosatisfacen.Y eso de Filsa pa'l que lee me parece una gansada tan infantil que creo que los únicos que se quejan son los que leen los grafittis mientras están sentados en el inodoro del baño de la estación de buses ... ¡joder!