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Trabajos forzados: los oficios de los escritores

Malraux fue ministro. Jack London cazaba ballenas. Orwell, policía...

26 de septiembre de 2011. Estandarte.com

Qué: Trabajos forzados. Los otros oficios de los escritores Autora: Daria Galateria. Traducción de Félix Romeo Editorial: Impedimenta Año: 2011 Páginas: 208 Precio: 19 €

Trabajos forzados, de Daria Galateria, nos cuenta “Los otros oficios de los escritores”. En la línea del Diccionario de Literatura para Esnobs que publicó la misma editorial Impedimenta (¿quién si no?) el año pasado, nos ofrecen ahora este delicioso bocado para todos aquellos a los que nos gusta “leer la literatura” de otra manera.

Acercarnos a los textos por la puerta de atrás… o la del lateral. Algo que sabe hacer como nadie Félix Romeo, que no por casualidad es el traductor de este curioso libro.

Trabajos forzados es una apasionante y amena guía de supervivencia que recorre los modos con que los astros más brillantes del universo literario han ido capeando el temporal del hambre. Ya sea porque buscaban hacerse ricos, o tal vez simplemente para sobrevivir, los escritores se han entregado tradicionalmente a los oficios más diversos: desde buscadores de oro a carteros, desde soldados de fortuna a industriales, desde contrabandistas de opio a fogoneros en un barco en China; conductores de autobús, verdugos, guardias, vendedores de bisutería…

Malraux fue ministro; Jack London sobrevivió como cazador de ballenas en el Ártico. Colette abrió un salón de belleza y Orwell pasó de ser policía en Birmania a vivir lavando platos en Londres. Gorki trabajó como pinche de cocina en el Volga; Saint-Exupéry pensó toda su vida que su verdadero trabajo era el de aviador; e Italo Svevo dejó de ser un gran industrial para poder escribir: le bastaba concluir una línea para sentirse pagado.

Con ese envoltorio que Impedimenta sabe dar a sus joyitas, y que esta vez riza el rizo con esa ilustración de un anuncio de tabaco ruso de principios del XX, Trabajos forzados es ese librito que podrías regalar a un buen número de amigos bibliófilos. Y les harías feliz.

Comentarios en estandarte- 1

1 | Eva Luna 28-10-2011 - 20:06:33 h
Ay, los trabajos alimenticios de los escritores... ¿Cómo se gana la vida un escritor?