Biografía de Dashiell Hammett, ¿el padre del género negro?

06 de marzo de 2024. Mariola Díaz-Cano Arévalo

Samuel Dashiell Hammett moría el 10 de enero de 1961 a los 68 años en Nueva York. Si a Edgar Allan Poe se le considera el pionero del género negro con su detective Auguste Dupin, a Hammett se le ha llamado el padre del género negro, aunque hay precedentes como el de Carroll John Daly. Contamos un poco de su biografía y obras que todos conocemos.

 

La vida de Dashiell Hammett

Como anécdota, trabajó en la famosa agencia de detectives Pinkerton. Combatió en la Primera Guerra Mundial y fue un gran activista político, y siempre padeció de una tuberculosis contraída en 1919 a la que añadió su alcoholismo.

Comenzó su carrera literaria con algunas novelas cortas que había publicado desde 1924 y reunió bajo el título de El gran golpe. En 1929 sacó Cosecha roja, un éxito que lo catapultó a la fama y que redondeo con El halcón maltés y El hombre delgado entre otras. Y creó a personajes tan emblemáticos del género como Sam Spade, la pareja de detectives Nick y Nora Charles o al agente de la Continental.

 

Dashiell Hammett: su estilo e influencias

Hammett recogió las bases que había puesto Carroll John Daly para un nuevo y entonces considerado subgénero literario, la novela negra, en concreto, el del popular hard boiled, que se distingue de ella por presentar muchos escenarios en los que intervienen componentes, hasta entonces poco desarrollados o mostrados en la literatura, como la extrema violencia o el sexo.

Le influyeron escritores como Raymond Chandler, otro grande de su estilo. Y es también ese estilo particular el que acompaña a la creación de las iconografías, personajes y argumentos de sus obras. Su narrativa es lacónica e impresionista, de pocos detalles pero muy significativos para que sea el lector el que les dé forma a personajes y ambientes.

Otra característica muy importante es el realismo que imprime a las historias porque conoce la corrupción de la sociedad norteamericana en contextos tan convulsos como los que se crearon después de la crisis del 29 y la Gran Depresión, en los que publicó sus principales obras. Es esa atmósfera la que inspira el pesimismo que invade en general a sus personajes y tramas.

 

El estilo personal de Dashiell Hammett

Posiblemente fue lo que lo diferenció de otros colegas del género, sobre todo de los de la escuela más sajona. Y es que no tiene ningún interés por mostrar el proceso o los pasos de investigación de un delito o crimen, sino lo ético y social alrededor o de fondo. De modo que es ese gusto por la parte más «humana» del componente criminal y la mezcla con sentimientos románticos lo que más sobresale de su obra.

 

Dashiell Hammett y el cine

Quizás tan buenas como sus originales literarios son las versiones que se llevaron al cine.

Así, en los años treinta, William Powell y Myrna Loy dieron vida a Nick y Nora Charles, ese matrimonio excéntrico y millonario que, junto a su perro Asta, se dedican a solucionar casos en lujosos ambientes en los que también existe el mal. Fueron personajes que Hammett creó en El hombre delgado. Se hicieron una serie de películas que empezó con La cena de los acusados, de W.S. van Dyke.

Ya en los 40 se hizo un clásico memorable del El halcón maltés, que dirigió un joven John Huston en 1941 y donde Humphrey Bogart interpretaba como nadie al duro e irónico detective Sam Spade, acompañado por Mary Astor y Peter Lorre. Un año después Alan Ladd y Verónica Lake protagonizaron La llave de cristal, de Stuart Heisler, cuyo guion firmó también el propio autor.

Terminamos con una frase de El halcón maltés: Desapareció sin más… Como un puño al abrir la mano.