Pasión por leer. Pasión por escribir.

Portada > Noticias > Varios > Buenos presagios, la adaptación televisiva de la novela de Terry Pratchett y Neil Gaiman

Buenos presagios, la adaptación televisiva de la novela de Terry Pratchett y Neil Gaiman

'Buenos presagios' es el título del libro homónimo que escribieron conjuntamente Neil Gaiman y Terry Pratchett. Ha sido adaptado a la televisión en una serie de dos temporadas.

23 de abril de 2024. Mariola Díaz-Cano Arévalo

Qué: La adaptación televisiva de Buenos presagios (Good Omens) Distribuidora: Amazon Prime Video Año: 2019-2023 Directores: Neil Gaiman (Creador), Douglas Mackinnon

Buenos presagios es la adaptación televisiva de la novela de Terry Pratchett y Neil Gaiman que ya hemos visto y que es producto del plan de los autores para adaptarla como una película con varios directores y guionistas. Al final se decidieron por una serie de televisión, pero el proyecto se canceló sin más explicaciones. Más tarde, cuando Pratchett murió en 2015, Gaiman no quiso trabajar solo en esa adaptación.

Pero todo cambió cuando recibió una carta del propio Pratchett, que la escribió antes de morir y lo animaba a terminarla con las ideas que ya tenían. Cuando el proyecto llegó a manos de Amazon Prime Video, se puso en marcha y el resultado ha sido una serie que convence a los seguidores de los autores tanto como a los no tan amantes del género fantástico. Y sobre todo divierte.

 

Buenos presagios: Un demonio y un ángel

Con dos temporadas —la primera se estrenó en 2019 y la segunda en julio de 2023—, la serie cuenta básicamente la historia de amistad, a lo largo de los siglos y desde el principio del mundo, entre Crowley (David Tennant), un ángel caído convertido en un demonio irónico, histriónico, pero no tan malvado como dicta su condición, y Azirafel (Michael Sheen), un ángel de verdad absolutamente adorable, bondadoso y empático que tampoco luego es tan bueno como se le supone.

Ambos llevan todo el peso de la función junto con otros personajes secundarios que encarnan nombres como Jon Hamm (visto en Mad men o Black mirror) y que en la segunda temporada también tiene mucho protagonismo como el arcángel Gabriel, o el veterano Derek Jacobi, en una aparición decisiva ya al final.

Lo mejor de las temporadas es que son cortas —de seis episodios— que casi se pueden ver en un maratón de una tarde. Y también las tramas principales salpicadas de disgresiones y flashbacks que van contando la historia de cómo se forjó la improbable pero real amistad entre los dos protagonistas desde el principio de los tiempos. Eso también da pie a meter esos sketches tan propios del humor británico que también se apoyan en unos efectos visuales más que llamativos. Ya solo los títulos de crédito del comienzo merecen la pena.

 

La serie Buenos presagios

En la primera temporada Crowley y Azirafel, que viven muy bien en la Tierra —Crowley es un hedonista y Azirafel es absolutamente feliz en su librería— van a tener que aliarse para impedir el Apocalipsis que han dictaminado sus respectivos jefes, muy hartos ya de la humanidad.

Y en la segunda tendrán que resolver el misterio que hay cuando el arcángel Gabriel aparece desnudo y sin memoria en la librería de Azirafel. Pero ese misterio viene acompañado de más subtramas que irán descubriendo más relaciones entre todos los personajes y más episodios de las intervenciones de los dos amigos en la historia (como el encuentro con Job y su familia), además de marcar su destino. Por supuesto, al final, nos quedamos con ganas de más y las puertas abiertas para una futura tercera temporada.

 

Otro acierto de la serie Buenos presagios

Precisamente el contrapunto o complemento que son Crowley para Azirafel y viceversa, y la extrapolación del universo «humano» lleno de burocracia, leyes, reglas, jefes y subordinados que se da también en el Cielo y el Infierno, y que tiene también sus mismos defectos.

En definitiva, si se es lector de Pratchett y Gaiman quizás se va a disfrutar más, pero es entretenida para cualquiera a quien le guste la fantasía y pasar un buen rato.

 

Comentarios en estandarte- 0