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David Goodis, el escritor injustamente maldito del género negro
Una vida que le valió el paso a la eternidad de los grandes del género negro.
30 de octubre de 2024. Mariola Díaz-Cano Arévalo
Qué: Biografía de David Goodis
David Goodis es uno de esos escritores malditos, de vida muy complicada y demasiado corta que también le valió el paso a la eternidad de los grandes en el género más negro y atormentado.
Biografía de David Goodis
Falleció el 7 de enero de 1967 en un psiquiátrico de Filadelfia sin llegar a cumplir los 50 años. Se graduó en periodismo y trabajando en una agencia de publicidad escribió su primera novela que se publicó en 1939. Luego firmó otras 20 más de las llamadas pulp y, a la vez, también escribía guiones en Hollywood hasta que Hollywood se fijó en su trabajo.
De su máquina de escribir salieron clásicos como Disparad al pianista, La senda tenebrosa o Al caer la noche, que se llevaron al cine con grandes nombres detrás de la dirección y la interpretación de sus personajes.
Terminó regresando a Filadelfia con sus padres y uno de sus hermanos, que era esquizofrénico. Había tenido otro, que murió de niño a causa de un cáncer. En teoría, la causa de su fallecimiento fue un derrame cerebral, pero días antes le habían dado una paliza al resistirse ante un atraco, así que algunos también le atribuyeron su muerte a esas heridas.
David Goodis y sus novelas
Disparad al pianista
Disparad al pianista posiblemente es su obra maestra o, al menos, así la consideran, pero sin duda es una una de las mejores novelas del género.
La historia se desarrolla en un bar de mala muerte de Filadelfia, donde llega un hombre fuera de sí y huyendo. Está buscando al pianista, Eddie, su hermano porque lleva muchos años sin verlo y necesita ayuda y refugio. Pero Eddie se niega porque no quiere saber nada ni quiere problemas.
Es entonces cuando aparecen dos pistoleros y Eddie termina ayudando a su hermano a escapar. Pero él también deberá huir y lo hará con Lena, una misteriosa camarera y la única que conoce su verdadera identidad porque él es Edward Webster Lynn, un famoso concertista de piano que tuvo mucho éxito hace años. Lo que no se sabe es por qué lo oculta, ha acabado en ese antro y está empeñado en borrar cualquier rastro de su pasado.
El director francés François Truffaut hizo una adaptación cinematográfica en 1960 que devolvió el interés por la obra de Goodis de nuevo. Su protagonista fue Charles Aznavour.
La senda tenebrosa
La senda tenebrosa también es otra de las más famosas novelas de David Goodis, que aún adquirió más notoriedad por la versión que Delmer Daves llevó al cine en 1947 y que protagonizaron dos estrellas de esos años como fueron Humphrey Bogart y Lauren Bacall.
El personaje protagonista de esta historia es Vincent Perry que, condenado injustamente a cadena perpetua por el asesinato de su mujer, escapa de prisión para intentar demostrar su inocencia. Conoce a una atractiva desconocida que le prestará ayuda porque su padre también fue víctima de un error judicial. Y entre huir de la policía y tratar de descubrir quién mató a su mujer tenemos a los habituales chantajistas y mujeres fatales del género.
Al caer la noche
Por último, destacamos Al caer la noche, la cuarta novela de Goodis, que también fue adaptado a la gran pantalla en 1956 por Jacques Tourneur, otro director de origen francés que firmó sus mejores obras en el cine negro de finales de los 40 y la década de los 50. La protagonizaron Aldo Ray y Anne Bancroft.
Cuenta la historia de James Vanning, un diseñador del que solo sabemos que parece estar huyendo de algo. En una cafetería conoce a una mujer, una modelo que también parece estar metida en líos. Entre ellos surge una relación que terminará ayudándolos.
Es en distintos flashbacks cuando nos vamos enterando de lo que pasa. Así sabemos que en una salida para ir de pesca Vanning y un amigo se tropiezan con una banda de atracadores que ha asaltado un banco. Estos matan al amigo y dan por muerto a Vanning, pero está vivo y, además, encuentra el dinero del atraco. Por eso los atracadores lo están persiguiendo y también la policía, que lo acusa de la muerte de su amigo.
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