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El huerto de Emerson, Luis Landero

Enriquecedores y cautivadores recuerdos de un lector, escritor y profesor.

22 de julio de 2022. Estandarte.com

Qué: El huerto de Emerson Autor: Luis Landero Editorial: Tusquets Ediciones Año: 2021 Páginas: 240 Precio: 19 € (papel), 9,99 € (eBook)

El huerto de Emerson, de Luis LanderoEn El huerto de Emerson, Luis Landero (Alburquerque, Badajoz, 1948) comparte su biografía, pero no en una sucesión de hechos bien ordenados cronológicamente, sino en una amalgama de sentimientos, sensaciones y aprendizajes, en la que la literatura tiene un peso importantísimo.

Lector, escritor y profesor, Landero refleja en estas páginas su devoción por el lenguaje. «Al calor de las palabras, todo de pronto parece nuevo y recién inventado», apunta en una de las tantas reflexiones en las que vuelca ese idilio que mantiene con las letras.

Escribir es a un tiempo gozo y necesidad. Requiere, como cuenta en estas páginas, memoria e imaginación; mantener viva la infancia y saber hacerla convivir con la sabiduría que dan los años.

Alguien como Landero, reconocido como uno de los mejores escritores en lengua castellana de nuestro tiempo y que ha recibido prestigiosos premios como el Nacional de Narrativa, tiene también momentos de vértigo en los que no encuentra las palabras, en los que tacha más que escribe.

Para esos momentos, atesora una plegaria. Está dirigida al señor de la invención y de la gramática y a él se encomienda pidiéndole elementos que podríamos considerar cimientos de la buena literatura: desde la fantasía y la exactitud en el lenguaje, al ritmo, el amor por los detalles, la capacidad de pensar con imágenes o de preservar el lenguaje oral.

Esa plegaria es uno de los tantos regalos que brinda este breve libro, en el que Landero se muestra gozoso y generoso. Comparte mucho en sus páginas: desde recuerdos de su infancia extremeña y sus primeros trabajos en Madrid a enamoramientos, sus viajes soñados y sus lecturas, entre otras vivencias.

Se pone también su traje de profesor y en uno de sus capítulos, «El niño y el sabio», rememora lo que contaba a sus alumnos el primer día de clase. Aquí sale a relucir el huerto de Emerson del título –detrás del que hay una bonita historia que arranca una sonrisa; por cierto, no es la única que despierta el libro–.

Con una sabiduría serena y apasionada al tiempo recuerda que todas las personas tienen la semilla de la originalidad, pero que hay trabajarla para que fructifique: «Para llegar a saber lo que valéis, y quiénes sois vosotros, os lo tenéis que currar duro, no lo olvidéis».

Y en ese trabajo es importante, entre otras cosas, mantener viva la capacidad de asombro infantil, acercarse a las cosas para conocerlas de primera mano y no acomodarse en la modorra de la costumbre. Landero quiere que sus alumnos sean lectores con criterio, que valoren la importancia de la lentitud, la soledad y la concentración.

Los que sostienen este delicioso libro entre sus manos se convierten de algún modo en alumnos que agradecen estos consejos, hilvanados con una bella prosa que fluye con naturalidad.

O en cómplices que mientras leen sienten que escuchan el susurro de quien saborea los recuerdos de su vida en un relato emocionante y cautivador, que da importancia a la memoria, a saber escucharse y a no dejarse llevar por las prisas. En esos recuerdos enlaza a sus familiares, sus compañeros de trabajo o sus vecinos del barrio con los autores que le han acompañado y ayudado a conformar su carácter: Adorno, Emerson, Machado, Kafka, Alejo Carpentier, Shakespeare

De esta lectura surgen muchas otras: no solo las que sugiere imbricadas en sus vivencias, también las de sus libros anteriores. Tal es el buen sabor de boca que deja este huerto de Emerson, del autor de Lluvia fina, La vida negociable, El balcón en invierno, Absolución o Juegos de la edad tardía, entre otros.

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