Cuando el final se acerca, de K. Mannix

16 de noviembre de 2019. Estandarte.com

Kathryn Mannix es doctora especialista en cuidados paliativos y ha escrito Cuando el final se acerca para normalizar uno de los grandes temas que se siguen silenciando o escondiendo: la muerte. Su propósito es redundar en aquello que los sabios de la antigüedad, los filósofos clásicos, sabían: que para vivir mejor es necesario aprender a morir mejor también. Y como en esto del aprendizaje la práctica es una de las mejores bazas –y como no podemos morirnos más que una vez– una buena solución puede ser recurrir a quienes han estado acompañando a enfermos en sus agonías. “Mis disculpas si esto te entristece”, escribe Mannix, cuando viene de hablar con toda la claridad y crudeza necesarias de la banalización de un hecho ante el cual perdemos las riendas: “Al no saber qué esperar, la gente se cree a pies juntillas lo que ve en la televisión, el cine, las novelas, las redes sociales o las noticias. Estas versiones de la agonía y de la muerte, que con frecuencia recurren al sensacionalismo y se trivializan al mismo tiempo, han reemplazado lo que en su día era una experiencia común: observar a las personas moribundas del entorno, ver la muerte lo suficientemente de cerca para reconocer sus patrones, entender que se puede vivir bien dentro de los límites de la pérdida de energía e incluso desarrollar cierta familiaridad con las fases que se suceden en el lecho de muerte. Esa rica sabiduría se ha perdido en la segunda mitad del siglo XX”.

Hay que reconocer que los avances médicos, en la tecnología y tratamientos, la medicina preventiva y otros adelantes han hecho aumentar considerablemente la esperanza de vida. Y que eso es bueno. La muerte se atrasa, pero, de momento, no es posible esquivarla por mucha literatura que se lea y se escriba sobre la posibilidad de que así sea. Entonces ¿no haríamos mejor procurando estar informados sobre ella? “La tasa de mortalidad –explica Kathryn Mannix– continúa siendo del cien por cien, y el patrón de nuestros últimos días y del modo en que morimos no ha cambiado. Lo único distinto es que hemos perdido la familiaridad que tuvimos en su día con ese proceso, y también el vocabulario y el protocolo que tan buen servicio nos prestó en épocas pasadas, donde la muerte se entendía como algo inevitable”.

Publicado por Siruela, Cuando el final se acerca ofrece la familiaridad con la muerte de quien ha tratado a diario con ella y ha hecho exactamente lo contrario de lo que se recomienda habitualmente: llevarse el trabajo a casa, seguir rumiando las historias de los pacientes, encontrándoles un sentido y una utilidad para los demás. A través de una treintena de casos reales tomados de una experiencia clínica de más de cuatro décadas, Kathryn Mannix plantea las preguntas y comportamientos más íntimos en torno al proceso de la muerte y habla de ellos con una delicadez y sinceridad conmovedoras. Los relatos muestran cómo quienes van a morir a menudo se aferran a los que quedan, no porque estos sean héroes, personas más valientes o fuera de lo común, sino porque esto es lo que hacemos los seres humanos. ¿No deberíamos saber cómo afrontar mejor estas situaciones? ¿No deberíamos estar preparados para las despedidas? Estos testimonios pueden servir como guía para saber actuar en esos momentos tan difíciles. Algunos relatos son dramáticos, otros emocionantes, alguno hasta divertido… Pero todos desprenden su dosis de sabiduría y de todos se puede aprender algo. O mucho. De modo que reiterando las disculpas que tímidamente parecía pedir la autora se confirma lo que ella escribía seguidamente: “aunque creo que también puedes encontrar consuelo e inspiración. Espero que te sientas menos atemorizado y más dispuesto a planificar y hablar de la muerte. He escrito este libro para que todos podamos vivir mejor cuando el final se acerca o, lo que es lo mismo, morir mejor”.