Pasión por leer. Pasión por escribir.

Portada > Noticias > El español, nuestro idioma > Los sufijos: qué son y cómo funcionan

Los sufijos: qué son y cómo funcionan

Los sufijos pueden formar palabras y ofrecen matices afectivos.

27 de marzo de 2024. Estandarte.com

Qué: los sufijos

Sufijos: ejemplos, qué son y cómo usarlosLos morfemas sufijos tienen en su mano la capacidad de formar palabras. Lo hacen por derivación, es decir, parten de un morfema léxico o raíz y, colocándose detrás, modifican su significado, creando una nueva unidad lingüística que puede o no tener la misma categoría gramatical que la palabra de la que nace.

Pueden crear sustantivos (derivación nominal) a partir de verbos (de legislar surge legislación; de nombrar, nombramiento; de torcer, torcedura; de vengar, venganza; de caer, caída…); a partir de adjetivos (de bueno, bondad; de romántico, romanticismo; de valiente, valentía; de torpe, torpeza…); o de otro sustantivo(de piedra, pasamos a pedrada; de sal, a salero; de empresa a empresario…); también forman verbos (derivación verbal) a partir de sustantivos (peine, peinar; pedal, pedalear…) y de adjetivos (capaz, capacitar; pálido, palidecer…), y son capaces de crear adjetivos (derivación adjetival) a partir de un sustantivo (sed, sediento; calor, caluroso; barba, barbudo; burla, burlón; historia, histórico;escuela, escolar; gramática, gramatical; novela, novelístico…) o de un verbo (dormir, dormilón; exigir, exigente; temer, temible…). Entre los derivados adjetivales se encuentran los gentilicios: aquellos que sirven para designar a los originarios de un determinado lugar (murciano, gomero, bilbaíno, tinerfeño, cordobés, conquense, ceutí).

Los distintos sufijos se asocian a significados determinados:

-colectividad:-al, -eda, -edo, aje (por ejemplo, rosal).

-abstracción:-ancia, -ción, -dad, -encia, -es, -ismo (por ejemplo, creencia).

-acción:-ada, -ida/o, -ción, -mento, -miento, -anza (por ejemplo, navegación).

-lugar:-ario, -dero, -dor, ía (por ejemplo, confitería).

-agente, instrumento, lugar:-ante, -dero, -dor, -dura, -ente, -tor (por ejemplo, comerciante).

-oficio, relación, afición o cualidad: -al, aria/o, -ero, -ismo, -ista, -ivo, -ura (por ejemplo, electricista).

A esa importante función productora, se suma la que tienen algunos morfemas sufijos para enriquecer la comunicación con connotaciones que consiguen pasar de la neutralidad a un enfoque más empático. Se trata de los sufijos apreciativos con sus matices afectivos que, según el contexto, pueden significar aprecio (abuelita), desprecio (personajillo), atenuación (problemilla), intensificación (calorazo)… Este valor es importantísimo para conducir sentimientos, ganar dramatismo, dibujar personajes y situaciones, acercarse al lector (Galdós era un gran maestro en esto, como en tantas otras cosas relacionadas con la lengua). Los sufijos apreciativos se organizan en aumentativos (-on, -azo, -ote); diminutivos (-ito, -ico, -illo, -ín, -uco, -ete) y despectivos (-ucho, -aco, -acho, -ajo, -astro, -ato). A veces hay traspaso de unos a otros y, por ejemplo, el diminutivo toma un cariz peyorativo o un sufijo en principio neutro se carga de connotaciones. Esa es la riqueza de una lengua viva.

Comentarios en estandarte- 0