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Las nuevas librerías españolas más curiosas

Son algunos de los valientes espacios que abrieron en 2013.

08 de enero de 2014. Estandarte.com

Qué: Una selección de las nuevas librerías abiertas en España en 2013.

En Estandarte nos apasionan los libros, y de manera natural y consecuente nos apasionan también las librerías. Las buenas librerías, las de verdad: esos espacios en los que se venera la literatura, en los que el librero —o la librera: cada vez más mujeres, mayoría en este artículo— ha leído casi todos los títulos que ofrece, y vende libros porque confía en ellos con sinceridad y entusiasmo, obviando modas e intuyendo no qué se leerá hoy o mañana, sino dentro de lustros.

Durante el año 2013, entre lamentos por la crisis y negros vaticinios sobre el hundimiento del panorama editorial —que si no se compran tantos títulos, que si el libro digital acabará con el libro impreso, etcétera—, muchas nuevas librerías han intentado llevar la contraria aquí y allá, por toda España.

Decenas de espacios recién inaugurados, impulsados casi todos por jóvenes apasionados por la literatura, protagonizan un fenómeno similar al ocurrido hace algunos años con las editoriales independientes. Visitamos contigo cinco de esas nuevas librerías, abiertas en España durante el ya pasado año 2013. ¿Cuáles se nos escapan? ¿Por qué deberían figurar en este listado? Cuéntanoslo en los comentarios...

Eva Boj es librera de toda la vida. De las de toda la vida, de las que lo conocen todo sobre cada título y no necesitan recordar o consultar para ubicarlo o recomendarlo con pasión, y de las que llevan también toda la vida en este oficio. En Atticus-Finch (La Palma, 78), enclavada en el madrileño barrio de Malasaña —en el que la librería se ha integrado de maravilla: en ocasiones saca sus libros a la calle, y su escaparate se disfruta en las tiendas cercana—, el protagonista es el libro.

Igual que ocurría al personaje de la novela Matar un ruiseñor, en Atticus-Finch entran ganas de sentarse y leer: un cálido hogar para los amantes de los libros, que reserva su espacio para exponer —y vender— la obra de ilustradores de calidad, servir desayunos y meriendas y café y té a deshoras, organizar actividades —con especial atención a los más pequeños— y ofrecer no sólo libros, sino también merchandising literario.

David Brieva y Luci Romero prefirieron hacerlo. Aunque su librería —Bartleby, en Valencia— deba su nombre al mítico personaje de Herman Melville, a ese escritor ficticio que escribía muy a su pesar, estos dos jóvenes libreros atienden a tres pilares fundamentales: el cómic, la literatura infantil y la narrativa (aunque también guardan un sitio para el ensayo y la poesía).

Su espacio —en el número 50 de la calle Cádiz, en el barrio de Ruzafa, cada vez más activo culturalmente— se inauguró en pleno verano y mima a las editoriales independientes, la literatura de calidad y el lector exigente que, además de poner nombre a un clásico ignoto o un nuevo autor por descubrir, puede tomarse un café mientras elige o llevarse un buen vino a casa. La librería, amplia y luminosa, bulle de vida cada día: presentaciones, talleres, actividades infantiles e incluso cine o música.

La librería Birlibirloque (Sevilla) abrió sus puertas en los primeros días de abril. Situada en la céntrica calle de Amor de Dios, en el número 17, entre la bulliciosa La Campana y la Alameda de Hércules —zona de ocio, tapas y copas—, su responsable es la filóloga Almoraima González. Como ocurrre en otras nuevas librerías, acoge numerosas actividades para crear comunidad —en pocos meses ya cuenta con una clientela fija y muy fiel— pero, a diferencia de otras, en Birlibirloque no hay ni rastro de café o vino.

Su particularidad: el fondo y la poesía. El lector encontrará novedades en Birlibirloque, claro, pero también libros de años atrás en los que Almoraima confía. En ese fondo destaca la atención brindada a la poesía, que aquí goza de varias estanterías; no en vano, la librería debe su nombre a un libro del poeta José Bergamín.

La granadina Ubú (Plaza de las Descalzas, 3, bajo izquierda) declara sus intenciones desde el nombre: teatro, teatro y teatro. Y libros de segunda mano, y no sólo librería de viejo, que también Marian Recuerda —con el teatro, teatro y teatro en las venas, y una larga experiencia en otra librería similar de la ciudad— convoca en su espacio a sellos independientes —en todos los géneros— de los que cuidan su catálogo, así como a escritores y artistas que se autoeditan con el mejor gusto.

Títulos para todos los bolsillos y para todos los lectores desde el pasado octubre en ese laberinto al que llaman el Realejo, en el que Ubú tiene vocación de echar raíces, de convertirse en una librería de barrio. Ubú cuenta con un sala para exposiciones y talleres, y programan conciertos acústicos de grupos granadinos y, faltaría más, representaciones de pequeñas obras teatrales.

Henry David Thoreau se retiró a una cabaña en el bosque construida por él mismo, con la intención de vivir con lo esencial, con aquello que le procurase una vida feliz, sin más, que ya es mucho. Esa cabaña se erigió junto al lago Walden, y Walden se tituló el libro en el que contó sus motivos y sus peripecias, hoy un manual de referencia para muchos.

Walden (Paulino Caballero, 37) se llama la particular cabaña de Daniel Rosino, historiador de formación y librero de vocación y experiencia: Walden es, también, una librería-café en el Ensanche de Pamplona, la quinta librería en un milagroso tramo de pocos metros. El interiorismo del local ha corrido a cargo del escultor y arquitecto Aser Longás, y recuerda a todo lo que Thoreau promulgaba: de momento, aunque se ha celebrado alguna actividad, el librero prefiere centrarse en configurar su catálogo.

Comentarios en estandarte- 1

1 | Fernando 08-01-2014 - 18:40:03 h
Cuando se abre o inaugura una nueva librería es como el nacimiento de un primer hijo.Me ilusiona y pienso en su futuro.Las librerías no deberían desaparecer jamás,como el agua del mar o la alegría de la luz natural.Los libros son el alimento espiritual del pensamiento.Admiro el oficio de escritor.Atrapan los sentimientos y narran fracasos y éxitos de la ciudadanía..