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Proyecto y Premio Mandarache

O cómo poner a 3.000 jóvenes a leer novelas.

09 de septiembre de 2014. Emilio Ruiz Mateo

Qué: Proyecto Mandarache: Premios Mandarache y Hache Dónde: Cartagena (Murcia)

(Actualización del 9 de septiembre de 2014: el Proyecto Mandarache, junto a la revista Letras Libres, ha recibido el Premio Nacional al Fomento de la Lectura 2014, que concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte).

Cuando se habla de premios literarios, por desgracia suele venir a la cabeza el Premio Planeta, el Premio Nobel y otros grandes “monstruos”… Mejor nos iría si en esos casos pensásemos en iniciativas como la del proyecto Mandarache y sus Premios Mandarache y Hache.

¿Que en qué consisten? Pues en un premio que pone a leer seis libros a más de 3.000 jóvenes de una ciudad en tres meses. ¿No es maravilloso?

El proyecto Mandarache de formación de lectores se creó en 2004 y ha conseguido que más de 18.000 ciudadanos de Cartagena (Murcia) compartan sus lecturas. ¿Cómo? La dinámica es muy sencilla: los jóvenes se apuntan como jurado, se les proponen 3 novelas por premio (Mandarache es de literatura general, y el Premio Hache es de de literatura juvenil), los autores de esas novelas visitan la ciudad para presentar su novela y encontrarse con los jóvenes, y estos votan… ¡Nos gusta la idea! Y si lleva ya ocho años en activo, más aún. Nada mejor que un buen proyecto que se hace realidad y se mantiene en el tiempo.

Hasta el 20 de diciembre está abierto el periodo de inscripción como jurado de estos premios, a través de la web www.premiomandarache.es

El Premio Mandarache, que el año pasado contó con un jurado de casi 2.000 jóvenes entre 15 y 30 años, será disputado este año por los escritores Clara Sánchez con Lo que esconde tu nombre, el escritor y crítico Vicente Luis Mora con Alba Cromm y Manuel Rivas con Todo es silencio. Los tres escritores visitarán Cartagena durante los meses de enero, febrero y marzo para presentar sus novelas y encontrarse con cientos de lectores, que decidirán en el mes de abril cuál de las tres será la ganadora. Los autores ganadores recogerán personalmente el premio en una gala que tendrá lugar el 7 de mayo de 2013 en el Auditorio El Batel de Cartagena.

También los finalistas del Premio Hache de Literatura Juvenil, otorgado por más de 1.200 adolescentes de 12 a 14 años, visitarán la ciudad portuaria. Este año el Hache será disputado por Lola Beccaria con Zero, que inaugurará el próximo 18 de diciembre el programa de encuentros en Cartagena; Alfredo Gómez Cerdá por El rostro de la sombra, una novela sobre una gamberrada adolescente con terribles consecuencias; y David Fernández Sifres, por El faro de la mujer ausente.

Los libros, que son facilitados gratuitamente por el Ayuntamiento de Cartagena, serán leídos durante el curso escolar por cientos de lectores, que en el mes de abril votarán su libro favorito a través de la web del proyecto.

Los lectores de más de 30 años también podrán leer las novelas candidatas al Premio Mandarache y encontrarse con sus escritores gracias a los clubs de lectura “Mandarache+30”, organizados en las Bibliotecas Municipales, la Universidad Popular, la Universidad de Mayores de la UPCT y la biblioteca de la UNED-Cartagena.

Mandarache es un proyecto de formación de lectores organizado por el Ayuntamiento de Cartagena a través de sus concejalías de Juventud, de Cultura y de Atención Social, con el apoyo de la Dirección General Políticas e Industrias Culturales y del Libro del Ministerio de Cultura, la Universidad Politécnica de Cartagena y la Fundación Cajamurcia.

Comentarios en estandarte- 1

1 | Tatiana 17-11-2012 - 22:40:47 h
Me parece una idea genial, y ojalá copien la idea otros ayuntamientos de ciudades españolas. Me pregunto, sin embargo, quién selecciona las novelas que son juzgadas por los lectores. Si a la vez fueran a través de un concurso me parecería aún mejor. Y un comentario sobre el artículo: al hablar de las novelas, sólo al nombrar una de ellas (El rostro de la sombra) se da información sobre el argumento. ¿Por qué en esa sí y en las demás no? Me parece un fallo de redacción que resta calidad al artículo.