En la cocina con la drama mamá

29 de abril de 2013. Estandarte.com

En la cocina con la drama mamá (El libro de recetas que no conseguí escribir), de Amaya Ascunce, es la continuación lógica de aquel Cómo no ser una drama mamá, en el que la joven periodista nos advertía (con ternura, eso sí) contra los peligros de las madres sobreprotectoras.

Regresan ahora la Drama Mamá y la bloguera y periodista Amaya Ascunce, relatándonos paso a paso la singular experiencia de aprender a cocinar a sus treinta y pico años. Y quién mejor que su madre para enseñarle, esa señora que le sigue recordando que no deje los fuegos encendidos cuando sale de casa y que siente ya la cabeza, “¡Ya es hora, Amaya!"

Así cuenta con mucha gracia la propia Amaya Ascunce la génesis de En la cocina con la drama mamá, un libro muy apropiado para el Día de la Madre, por cierto: “Un día abrí un blog metiéndome con mi madre que se llamaba Cómo no ser una drama mamá. Planeta me publicó un libro, con el mismo título, que resulta que vendió muy bien y mi editora me propuso hacer un libro de recetas de mi madre. A mí me dio un ataque de risa, me atraganté, y le dije que lo único que teníamos en común una cocina y yo es que las dos existimos en el mundo. Pero luego empecé a pensar que podía ser un recuerdo maravilloso: que mi madre me enseñara a cocinar de verdad y contarlo. Pensé que era una afortunada porque, no sé si aprendería a freír un huevo, pero iba a tener un libro para mi madre y para mí solitas. Iba a tener la mejor excusa del mundo para reírnos, y una editorial la iba a encuadernar, le iba a poner tapas, y en la biblioteca nacional tendría un volumen en el que mi madre, Concha, la drama mamá, me enseñaba que el aceite justo para un gazpacho es la clave para que salga rico. ¡Y me iban a pagar por eso! La leche".                                           

El nuevo libro de Amaya Ascunce es el resultado de esa misión: escribir un libro de recetas junto a su drama mamá, y de paso, aprender a cocinar algún plato básico. La autora, que según ella misma afirma, no sabe cocinar (“Pero ni un poquito. Vamos que mi nevera es de balda vacía, balda vacía, salchichas, balda vacía, yogur caducado”) afirma poseer el récord Guinness del peor arroz blanco del mundo. Cómo intentar hacer una tortilla de patatas sin aceite de oliva, utilizando en su lugar mantequilla, o el descubrimiento de que, para hacer gelatina, “si el paquete dice cuatro horas en el frigorífico, pues está claro, dos en el congelador, y listo” son algunos de los momentos más divertidos del libro.

Mejillones al vapor, Pochas a la navarra, Bizcocho de yogur y limón, Pastel de pimientos del piquillo y atún, Compota de manzana o Lacón con pimentón son algunos de los platos que Ascunce “intenta” preparar en su libro En la cocina con la drama mamá.