Espido Freire y los malos del cuento

11 de febrero de 2013. Estandarte

En Los malos del cuento, desde Las mil y una noches hasta Crepúsculo, Espido Freire busca entre grandes personajes de la literatura para identificar quiénes son y cómo actúan esos temidos pero también fascinantes villanos. La escritora se ha propuesto ayudarnos a detectar, identificar y eludir a las personas y las situaciones dañinas, lo que desde hace un tiempo se viene denominando “gente tóxica”.

Espido Freire deja por un momento de lado la novela y se sumerge en este particular ensayo que se sitúa entre el libro de autoayuda y la crítica literaria. Freire relaciona los arquetipos más recurrentes del malvado con las obras literarias de toda índole que nos han aleccionado sobre sus peligros, sin obviar las referencias a tristes sucesos de actualidad. Su discurso nos recuerda algo que sabemos pero que a menudo nos empeñamos en silenciar: el mal existe y debemos estar alerta. Por nuestro propio bien. “Los monstruos existen”, afirma la autora, ya sea en lo más profundo del bosque o a la vuelta de la esquina, en las mentiras del lobo disfrazado de abuelita o del internauta anónimo, en la sonrisa seductora del vampiro o del vecino rijoso…

Los malos del cuento habitan entre nosotros, lo queramos o no; forman parte de nuestra vida cotidiana, desde tiempos inmemoriales: sutiles o sangrientos, sibilinos o brutales, familiares o desconocidos. Durante siglos, los mitos, las leyendas y los cuentos de hadas han dado cumplida noticia –y aviso– de su presencia, a la par que han servido de guía para enfrentarse a ellos.

Espido Freire (Bilbao, 1974) debutó como escritora con Irlanda (1998), novela que recibió una espléndida acogida por la crítica y fue galardonada con el Premio Millepage, otorgado por los libreros franceses a la novela revelación extranjera. En 1999 apareció Donde siempre es octubre y seis meses más tarde se convertía en la ganadora más joven del Premio Planeta con su obra Melocotones helados (1999). Sus otras novelas son Diabulus in musica (2001), Nos espera la noche (2003), Soria Moria (ganadora del Premio Ateneo de Sevilla 2007) y La Flor del Norte (2011), en la que relata la emocionante historia de Kristina de Noruega, una mujer que se convirtió en infanta de Castilla y que murió de manera misteriosa, olvidada por todos. Es autora, además, de varios ensayos, colecciones de cuentos, una novela juvenil y un libro de poemas.