Adiós al escritor Gore Vidal

01 de agosto de 2012. Estandarte

El escritor norteamericano Gore Vidal murió hoy en su casa de Hollywood Hill (California) debido a una neumonía. Crítico lúcido e incluso hiriente de los usos y costumbres de sus compatriotas, se caracterizó —sin embargo— por conocer y amar como nadie su país. Pocos describieron Estados Unidos con tanta elegancia y precisión.

Nacido en West Point (Nueva York) en 1925, Gore Vidal debutó en la novela con apenas veintiún años: Williwaw, sobre sus vivencias en una II Guerra Mundial que ya palidecía, es la primera de una larga lista de publicaciones en las que contó y juzgó el mundo gracias a la literatura.

No solo ficción, claro, pues al margen de su narrativa —el contenido homosexual de La ciudad y el pilar escandalizó al New York Times, que se negó a reseñar sus posteriores obras— y su teatro y guiones —con éxitos en Broadway, adaptaciones a la pantalla grande y contratos con MGM— brilló en el ensayo. Su trilogía histórico-política de los años setenta (Washington D.C., Burr y 1876), su autobiografía Palimpsesto (1995), Estados Unidos (1952-1992), por el que obtuvo el National Book Award… suponen hitos en la bibliografía de Gore Vidal.

Hasta una cincuentena de títulos entre ensayo, novela y teatro, por no hablar de multitud de artículos en los que Gore Vidal dio buena cuenta de su siempre insobornable opinión acerca de la actitud de Estados Unidos en diversos conflictos.

Su inquietud política —no en vano Gore Vidal era nieto de un senador por Oklahoma— no se limitó a la crónica o el activismo, sino que llegó a ser candidato demócrata a la Cámara de Representantes, trabajó para John F. Kennedy como asesor en materia artística y optó, veinte años más tarde, en 1982, al Senado.