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Blas de Otero, el poeta de la protesta social y la apuesta por la palabra clara

El poeta, figura de la literatura social junto a Gabriel Celaya y Ángela Figuera Aymerich.

15 de marzo de 2024. Estandarte.com

Qué: Blas de Otero cumple cien años. Cuándo: 15 de marzo de 1916. Dónde: Bilbao.

Hoy se celebra el nacimiento del poeta Blas de Otero (Bilbao, 15 de marzo de 1916), figura de la literatura social en España: quizá, junto a Gabriel Celaya y Ángela Figuera Aymerich, el principal en el género del verso durante los años cincuenta.

Resulta paradójico que hoy se lea menos que antes a Blas de Otero y, sin embargo, la protesta de sus versos vuelva a interpretarse tan actual como necesaria.

 

La vida de Blas de Otero

Blas de Otero comienza a escribir en sus años madrileños, todavía adolescente, cuando su familia se arruina y abandona Bilbao para comenzar de cero en otra ciudad.

En esa época hay dos muertes que le hacen tambalearse, y que acelerarán su comprensión de la poesía como refugio: cuando el poeta tiene trece años, la de su hermano mayor, y la de su padre tres años más tarde.

Blas de Otero empieza a estudiar Derecho, pero deja la universidad para regresar a Bilbao con su familia. Allí se convierte en el sustento económico de los suyos, e intenta continuar formándose, pero el exceso de responsabilidades le afecta y le orienta hacia tres nuevos intereses: además de la poesía, la amistad y la religión. Participa en la creación de diversos grupos poéticos, combate en la Guerra Civil —en el bando nacional— y compagina la escritura con el trabajo.

En 1943 abandona su empleo como asesor jurídico, y marcha a Madrid para estudiar Filosofía y Letras. Sin embargo, el ambiente universitario le defrauda, y termina volviendo a Bilbao y quemando todos sus poemas, arrepentido de haber renunciado a su familia por su carrera literaria.

Una sensación que en 1945 le conduciría al sanatorio de Usúrbil, donde se trataría de una depresión, y donde se replanteó todos los pilares de su vida anterior.

 

Las obras de Blas de Otero

En esa época renuncia a la amistad y a la religión, y se vuelca con la literatura: surgen Ángel fieramente humano y Redoble de conciencia, dos libros fundamentales de una escritura dirigida «a la inmensa mayoría», contra las palabras de Juan Ramón Jiménez. En su escritura destacan la protesta social, la apuesta por la palabra clara y la angustia de corte existencialista.

Blas de Otero se exilia a París en los años 50, y en 1952 se afilia al Partido Comunista. Regresa a España para terminar la escritura de Pido la paz y la palabra y En castellano.

Después de peregrinar por Castilla y León, donde vive gracias a la generosidad de aquellos con los que se encuentra, se instala —entre 1956 y 1959— en Barcelona. Allí publica por fin Ancia, que obtendría el Premio de la Crítica (1958) y el Fastenrath (1961).

Y de nuevo se ve obligado a marcharse de España: viaja a China y a la URSS, publica Esto no es un libro —en Puerto Rico en 1963— y Que trata de España —en Francia en 1964—, y termina exiliándose a Cuba. En este país le concederán el Premio Casa de las Américas, y contraerá matrimonio por primera vez, con Yolanda Pina; en 1967 se divorciará y regresará a Madrid, donde se reencontrará con Sabina de la Cruz.

En los diez últimos años de su vida —fallecerá el 29 de junio de 1979 en Majadahonda (Madrid), víctima de una embolia pulmonar— se dedicará a reescribir su propia obra y recopilarla en antologías.

 

Pido la paz y la palabra, de Blas de Otero

Escribo
en defensa del reino
del hombre y su justicia. Pido
la paz
y la palabra. He dicho
«silencio»,
«sombra»,
«vacío»
etcétera.
Digo
«del hombre y su justicia»,
«océano pacífico»,
lo que me dejan.
Pido
la paz y la palabra.

 

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